"SEÑORÍA", ¡RESPÉTEME!

Año 2013. Siglo XXI. Universidad pública, moderna. Sistema de Bolonia. Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación y más concretamente, la carrera elegida por una servidora: Publicidad y Relaciones Públicas. 

Tercero de carrera y un miércoles de mediados de octubre. ¿Tengo que aguantar que alguien, por desgracia con plaza de profesor, me trate de esta manera? Soy su alumna. Sí. Él es mi profesor. Sí. ¿Por ese simple hecho tengo que soportar sus impertinencias e insultos? NO.

Como ALUMNA y como MUJER, tengo DERECHOS. Derechos que desde hace más de treinta años las mujeres tenemos. Somos mayores de edad a partir de los dieciocho años al igual que los hombres, por si usted todavía no llegó a ese capítulo en la historia. Eso quiere decir, señor profesor que todo lo sabe y todo lo entiende, que soy una alumna, que soy mujer, que soy mayor de edad y que, ante todo, merezco RESPETO al igual que el resto de mis compañeros y compañeras.

Y digo compañeras y compañeros porque también merecen respecto las personas “gorditas”, sean compañeros o compañeras, sean de otro color, sean de otro país.

Como última apreciación de este miércoles, porque no quiero envenenar la sangre que corre por mis venas más de lo que ya están, digo lo siguiente: 

Señor, no soy, no somos “lindas muchachitas”. Nadie es “aquel gordito, baje aquí”. 

Antes de impartir ciertas asignaturas, aprenda usted lo que significa el RESPETO, el DERECHO y la ÉTICA.

Por desgracia , hasta aquí mi impresión de hoy.

¡SALUD Y REPÚBLICA!