NO ES EL DESTINO, PERO... ¿QUÉ ES?

"Parece que soy vulnerable a los malos momentos 

A los ratos sin tu calor, a las cosas sin tu aroma 
A los días sin tu sonrisa porque me hago trizas."

¿Sabes una cosa? Aunque nuestro último encuentro fuera más breve de lo que me hubiese gustado, nunca sentí tanto apoyo y tanta dedicación. Nunca ningún amigo me hizo sentir tan especial. Algo me dice que, después de cuatro encuentros a lo largo de nuestras cortas vidas, habrá un quinto encuentro y... ¿sabes? en ese quinto encuentro, no quiero alejarme de ti, no estoy dispuesta a dejar que eso suceda porque a las personas claves en la vida de uno, no se les debe dejar ir. Una persona con la que me gustaría mucho poder contar y a la que me gustaría mucho poder contarle penas y alegrías y escucharle cualquier cosa que necesite contarme.

La verdad, no creo en el destino, nunca lo he hecho pero, si me paro a pensar en ti y en mi.... ¿será que existe el destino? ¿será que nuestra amistad está incluida en el contrato de nuestras respectivas vidas? 

Son tonterías, recuerdos que me sacan una sonrisa.... ese punto justo de azúcar que solo tú y yo entendemos.

Cualquier momento malo se me ha olvidado. Cualquier momento malo, no es comparable a cualquiera de los momentos buenos.